La empresa Dulces Artesanos de Vejer S.L.L. surge del convencimiento empresarial de unas emprendedoras, las tres hermanas Magdalena, Oliva e Inés, y una cuarta de origen marroquí, de nombre Kadijja, que allá por el año 2004 expusieron su proyecto a una nueva entidad que abría sus puertas en Vejer de la Frontera (Cádiz), la Escuela de Empresas de la localidad.
Las cuatro emprendedoras vieron en aquel momento una oportunidad única para plasmar una idea que durante años les venia rondando en la cabeza, realizar una actividad empresarial, ya que desde jóvenes la cultura emprendedora había sido algo constante en su familia, y a la vez unir con su trabajo dos culturas cercanas, la occidental y la árabe, por medio de la elaboración de dulces artesanos bajo el nombre comercial Xauen, pueblo marroquí hermanado con el municipio de Vejer.
En el 2005, se integraron en la Fundación Red Andalucía Emprende, la cual les cedió una nave, en su recién inaugurada Escuela de Empresas.
Dulces artesanos de Vejer S.L.L., es por tanto una empresa joven, que ha sabido conjugar la tradición repostera árabe con las costumbres pasteleras de la Comarca de la Janda, y comercializa sus productos como un auténtico delicatessen, dentro de la actual oferta repostera. Pero pretenden ir más allá de la simple elaboración de dulces, quieren llevar el sabor de dos culturas, muy unidas en la zona desde siglos, a todos sus clientes. Para este fin sus maestras reposteras, con una gran tradición en su país de origen, Marruecos, elaboran una gran variedad de pasteles, tanto al horno o fritos con miel, sin perder esa elaboración artesanal que sigue los pasos de antiguas y tradicionales recetas árabes.
La intención es que sus productos sean los ideales para degustar a cualquier hora, y convertirlos en un original y delicioso regalo gastronómico, y cuidar minuciosamente todos los detalles de los mismos, la fabricación, selección de ingredientes, presentación de los mismos, hasta el envase de los productos está inspirado en la tradicional estrella de cinco puntas, emblema del pueblo marroquí.
Esta es, a grandes rasgos nuestra aún corta historia, una singladura, en momentos llena de ilusión, y en otros, no exenta de dificultades, pero gratificante por poder realizar una actividad empresarial, y a la vez, realizar nuestros sueños.
