El proyecto empresarial de Ana Venzal Cantavella busca ayudar a las empresas almerienses en su promoción exterior
El Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE) de Carboneras, perteneciente a la Fundación Andalucía Emprende de la Consejería de Economía y Conocimiento, acoge a una nueva emprendedora alojada gratuitamente en uno de sus cuatro despachos. Se trata de un proyecto empresarial enfocado hacia la traducción e interpretación de conferencias, del que es responsable Ana Venzal Cantavella, licenciada en Traducción e Interpretación por la Universidad Jaume I, de Castellón, quien ofrecerá igualmente servicios de organización de eventos para empresas y traducción de catálogos de sus productos con el objetivo de buscar mercados en el exterior y facilitar su internacionalización.
Ana Venzal realizó en 2013 prácticas empresariales en la firma de comunicación Eurologos Group Languages Communication, en Bruselas, como traductora al español, editora de la Revista Glocal y redactora de manuales de uso de SDL Trados Studio. Ha traducido a la escritora norteamericana Louisa May Alcott y ha cursado un master en Interpretación de Conferencias en la Universidad de la Laguna, en Tenerife. Profesionalmente, esta joven emprendedora ha detectado un hueco de mercado en la internacionalización de las empresas almerienses y ofrece su formación y experiencia para ayudar a promocionar sus productos en el exterior. Actualmente, colabora también con la ONG “La Vía Campesina”, traduciendo documentos, comunicados de prensa y todo tipo de textos del inglés al español.
El alojamiento gratuito es una servicio que proporcionan los CADEs, disponible para que los emprendedores afronten con mayor facilidad los primeros momentos de la empresa sin tener que asumir gastos de alquiler o compra de locales. Andalucía Emprende ha puesto en marcha en su web, www.andaluciaemprende.es, una plataforma de gestión de sus naves y oficinas –136 en la provincia almeriense, concretamente 30 naves y más de 106 despachos- que permite consultar la disponibilidad de los espacios y solicitar los que estén libres, además de conocer detalles de los proyectos alojados (nombre, sector, número de promotores, fecha de inicio y fin del alojamiento, etc.). Los alojamientos pueden durar de seis meses a un año, en el caso de despachos, y hasta tres años en las naves.