Fuente: Diario de Jerez
El Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial acoge una jornada con empresarios de la provincia para «intercambiar experiencias» entre los proyectos que promueve
Jóvenes y con una empresa a su cargo. Ése es el perfil de los emprendedores que se dieron cita ayer en la sede del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial -CADE- perteneciente a ‘Andalucía emprende’, un programa desarrollado por la consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía. Durante esta actividad, con el título ‘Un encuentro con… jornada de presentación de programas de apoyo a emprendedores’, los trece asistentes presentaron los proyectos que tienen entre manos y compartieron vivencias con el resto de compañeros en aras de establecer sinergias e intercambiar experiencias.
Uno de los programas que se puso en conocimiento de los presentes fue el denominado ‘Seniors’, por el que se ponen en común la experiencia de profesionales veteranos en la gestión de empresas, quienes asesoran a jóvenes emprendedores. Pero vayamos a los nombres propios: Isabel de la Vega, de la empresa Imot, ha estado tutorizada durante cinco meses por Ángel Lebrero Contreras, cuya experiencia al frente de Fedejerez, y en el área de negocio de Domecq, ha supuesto para Isabel una experiencia «muy positiva», ya que el empresario jerezano ha sido «como mi confesor y me ha ayudado mucho».
De la Vega, quien empezó su «aventura» hace un año y medio tras pasar a dirigir en solitario su empresa, tras el asesoramiento del CADE, narró que «me he montado una pequeña oficina, con mucha paciencia y poco a poco, van saliendo las cosas». Imot gestiona y coordina proyectos financiados por la Unión Europea, como pueden ser las becas Erasmus y Leonardo, que fomentan la movilidad de jóvenes por todo el continente europeo con el objetivo de realizar cursos de idiomas o conseguir prácticas en empresas, unas gestiones de las que se encarga la propia Isabel.
A su tutor, Ángel Lebrero, participar en el programa ‘Seniors’, le ha hecho «mucha ilusión», ya que «he colaborado con gente joven que inicia actividades empresariales, con lo que se demuestra que hay muchas personas con ganas de trabajar». Su experiencia con Isabel, según Ángel, sirve para «escuchar, debatir y reflexionar» y quiso dar varios consejos a los jóvenes emprendedores presentes en la jornada: «si sois pacientes y perseverantes, seguro que conseguís todo lo que os propongáis».
Para Lebrero, «estamos ante un momento de oportunidad», ya que aunque «parece que todo va mal, eso no quiere decir que no se pueda emprender en nuevas actividades que no están dentro de las tradicionales».
En estos momentos, el CADE de Jerez dispone de 11 módulos y oficinas en su sede de la calle Muro, en la que puede llegar a acoger un total de 19 iniciativas empresariales. Entre las que acoge actualmente hay una empresa dedicada a la externalización de servicios administrativos, una consultora de productos energéticos, una dedicada a la venta de libros electrónicos para distintos dispositivos, una consultora de exportación e importación a empresas que deseen abrirse a mercados exteriores, una revista de ocio de la comarca y una de desarrollo de software analítico, entre otras iniciativas.
Uno de los emprendedores del CADE es Juan Miguel Blanes, creador de ‘Aire-Arte’, una empresa encargada de ofrecer rutas turísticas en las que «me intento diferenciar de las que existen actualmente, pues me centro en anécdotas de los monumentos que visitamos y hacemos una ruta por varios tabancos», asegura su creador.
Otro de los presentes en la jornada fue Alejandro Caballero, uno de los creadores de ‘Ebook-teca’, una web de venta de libros electrónicos disponibles en varios formatos, tanto para ordenadores, como para ebooks, tablets o pdas- y que dirige junto a sus compañeras Almudena Bermúdez y Beatriz Valdés.
Justo al lado de Alejandro estaban sentadas Ruth Macho y Alba Martínez, quienes comercializan vía web todo tipo de productos para realizar manualidades. Otros proyectos expuestos fueron los de Fernando Andrades, quien dirige una empresa enfocada a la generación propia de energía solar en viviendas, o el de Carlos Morillo, cuya página web ofrece datos detallados a las empresas que usan redes de afiliados -affiliate marketing-.
Éstos no son más que algunos ejemplos de que, en tiempos de crisis, la iniciativa propia se constituye como una de las pocas alternativas para encontrar trabajo entre los más jóvenes. Desde luego, por esfuerzo no va a quedar.