• Arranque y puesta en marcha. Se debe arrancar el motor sin pisar el acelerador. En los motores de gasolina, es recomendable iniciar la marcha inmediatamente después del arranque, y en los diesel, esperar unos segundos antes de iniciar la marcha.
  • Cambios de marcha. Cuanto más larga sea la marcha menor será el consumo. Se debe usar la 1ª exclusivamente para el arranque, y circular lo más posible en las marchas largas y a bajas revoluciones. Se debe cambiar de marcha entre las 2000 y 2500 revoluciones/ minuto en coches de gasolina, y entre las 1500 y 2000 revoluciones/ minuto en los diesel.
  • Subida y bajada de pendientes. Durante las bajadas se recomienda levantar el pie del acelerador y aprovechar la inercia del coche, pero no dejar nunca el cambio de marchas en punto muerto, ya que es peligroso y aumenta el consumo. Para subir pendientes utiliza la marcha más larga posible.
  • Ahorrar carburante. Mientras no se pisa el acelerador, manteniendo una marcha engranada, y una velocidad superior a unos 20 Km/h, el consumo de carburante es nulo. Además, es recomendable parar el motor en las paradas prolongadas, las de más de 60 segundos.
  • Climatización del vehículo. Es aconsejable mantener el aire acondicionado entre 23º y 24º, y circular con las ventanillas cerradas, ya que circular con ellas bajadas supone un aumento del consumo.