fuente: andaluciainformacion.es
De la mano del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE) de Alquife, dependiente de la Fundación Andaluza, Andalucía Emprende, Roberto Casares mostró en el Instituto de la localidad alquifeña «La aventura de emprender: un viaje a la ilusión».
Roberto Casares compartió con al alumnado de secundaria los secretos que le han hecho nueve veces campeón de España en Tenis de Mesa, catorce veces número uno del ranking nacional… Pero en esta ocasión, el gerente del Club Tenis de Mesa Caja Granada, aplicó los mismos principios de su éxito deportivo al mundo empresarial.
Soñaba Casares con transmitir todos sus valores y todo el conocimiento adquirido cuando se jubilara, pero durante la entrega de unos premios, alguien le dijo que no tenía que esperar y así, sin pensar, dio el paso y se lanzó a una aventura que lo está llevando a transmitir ilusión por toda la provincia.
Trabajo duro, ilusión, preparación, adhesión, respeto por las reglas, confianza, liderazgo,… son los valores del mundo del deporte que Roberto Casares deja caer entre los pupitres con la idea de despertar en el alumnado la ilusión por emprender y crear empresas. Se trata, en suma, de aplicar esos ingredientes en una generación «magnífica, que está mejor formada» y trasladarle que «los sueños se consiguen y que algunos los hemos conseguido en el mundo del deporte», tal y como señala Casares. Desde el mundo del deporte incluso hay valores para los tiempos de crisis: «Valentía, paciencia y entereza», enumera el palista.
Casares compara la aventura empresarial con un viaje en el que hay que preparar un combustible para el trayecto y este no es otro que «la ilusión, y esta está muy relacionada con la visión, con el reto de futuro que cada cual tenga».
Fue ilusionante ver como cuarenta y cinco alumnos y alumnas de secundaria atendieron y participaron activamente durante dos horas en Alquife.
Como dijo Casares al finalizar la sesión, «espero despertar aunque sea solo a una de las personas que me han escuchado hoy».
Ojalá, al menos, rellenen un solo folio de pensamientos y reflexiones. Diez minutos de su tiempo para hacerlo, como manifestó Casares.