fuente: diario de Cádiz
Jóvenes emprendedores ponen en marcha sus proyectos gracias a la ayuda del CADE Esta red impulsó en 2012 la creación de 1.215 empresas
La crisis agudiza el ingenio. Por eso, en estos tiempos de zozobra económica, muchos jóvenes no se resignan a quedarse sin empleo y antes de estar parados, prefieren dar un paso adelante.
Es lo que ha hecho un grupo de emprendedores gaditanos, que para poner en marcha sus proyectos ha contado con la ayuda del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE) de Andalucía Emprende. Esta red de oficinas impulsó en la provincia durante 2012 la creación de 1.215 empresas y 102 planes de desarrollo, que generaron en su conjunto 1.628 nuevos puestos de trabajo, de los que 1.500 empleos procedían de las nuevas empresas y 128 de los planes de desarrollo.
Esos negocios fueron promovidos por 1.379 personas, en su mayoría jóvenes menores de 40 años (un 69,6%), destacando la presencia femenina, con el 44,1% sobre el total.
En Cádiz, el Centro de Apoyo de Andalucía Emprende se encuentra situado en el Edificio Astarté, desde donde se han erigido proyectos de muy diversa índole. Alfonso Vidal fundó en junio del pasado año una empresa dedicada al cultivo, engorde y producción de erizos marinos, porque «he estado cambiando de trabajo constantemente. Nunca he tenido estabilidad laboral», resalta.
Domingo Cabello es el gerente de Acos, Ingeniería de Gestión, una consultoría de ingeniería y arquitectura de project management. Este emprendedor dejó su anterior empleo, «porque quería montar mi propio negocio. Tenía una idea y quería llevarla a cabo. Necesitaba otra cosa en mi vida, y en vez de esperar a que me llegara, decidí hacerlo por mí mismo», declara.
Sergio García montó Iditic Software, una consultoría informática de desarrollo de software e innovación, porque «en mi anterior trabajo no estaba bien», mientras que para José Carlos Moreno, cuya empresa lleva su mismo nombre y se dedica a la ingeniería acústica y a los sistemas de información geográfica, pesó más «poder quedarme en Cádiz y estar con mi familia».
Iván Cano, gerente de Citerón Ediciones, una editorial especializada en Historia de la Ciencia, se dio cuenta de que el sector al que se dedica no goza de mucha oferta en la ciudad, por eso consideró como la salida más segura establecer su propio negocio. «El sector editorial es muy complicado, y más en Cádiz, así que me impliqué en esta aventura para tener y generar empleo», comenta.
No obstante, a pesar de las ganas e ilusión puestas en sus proyectos, estos jóvenes emprendedores son conscientes de que el camino no está siendo nada fácil. José Carlos opina que «hay que cambiar la contribución del autónomo, premiarle de alguna manera por dar trabajo, porque una vez que la empresa no va bien somos nosotros los que nos quedamos sin nada».
Domingo considera que «las cuotas del autónomo son abusivas si las comparamos con otros países». Por su parte, Iván sostiene que «los gastos fijos de los autónomos hay que reducirlos», a lo que José Carlos añade que «deberían ser un préstamo a devolver una vez que la empresa funcione». Todos coindicen en que «el papeleo debería ser más ágil, mejorarse los trámites».
Otro de los problemas al que se enfrentan es «la poca información de la que dispone el emprendedor, cuando te metes en el tema es cuando te vas enterando», afirma Sergio. Domingo resume sus reclamaciones en esta frase: «lo que pedimos es que nos quiten impedimentos a la hora de emprender, no nuevas ayudas».
Ante ellos se presenta un futuro incierto, pero el presente se muestra repleto de ilusión y esfuerzo. Iván dice que por ahora «trabajamos gratis», similar situación a la de José Carlos, quien asegura que «nosotros vamos a estar 1 o 2 años sin cobrar, sé que en ese tiempo nos vamos a generar ningún tipo de beneficio».
La pregunta en este caso es obligada: ¿Cómo hacen para mantenerse? José Carlos alude a su familia y pareja como ayuda económica fundamental, mientras que Iván señala que «he tenido que volver a casa de mis padres, como y duermo allí y hace mucho tiempo que no me compro nada».
«Hay ciertas cosas a las que hay que renunciar», apostilla José Carlos, a lo que Iván agrega que ni se le pasa por la cabeza «eso de pensar en tener tu propia casa, cambiar de coche, etc». Domingo concluye con el sentir general, «te sacrificas e inviertes todo lo que tienes para mantenerte unos pocos meses. Por eso hay que tener clara una visión a medio y largo plazo, porque te la estás jugando por ti, por tu empresa y por tu familia».